sábado, 13 de agosto de 2011

Los Palíndromos


Esta mañana leí en el diario que hoy es el Día Internacional de los Zurdos. Los zurdos son aquellas personas que tienen la destreza de dominar la lateralidad izquierda. Esta característica, que fue satanizada en el pasado, hoy esta siendo reconocida como una habilidad vinculada, entre otras, al desarrollo artístico y la inteligencia.

En un mundo creado para diestros la capacidad de adaptación de los zurdos es asombrosa. Para aquellos que pertenecemos a la gran mayoría diestra este hecho quizás no nos parezca relevante. Pero sin duda, si Ud. estimado diestro lector, alguna vez perdió, aunque sea momentáneamente, la posibilidad de usar, digamos, su mano derecha, sabe cuán dificil puede resultar intentar utilizar algo tan simple como una cuchara con la mano izquierda.


Aunque suene a un evento anecdótico y lo es para muchos, para los especialistas esta celebración pone en el tapete el tema de la importancia de establecer una lateralidad definida naturalmente, especialmente en los primeros años de vida. O eres diestro o eres zurdo sin interferencias. Esta aseveracion parte del hecho que aún existe la idea de que podemos "influenciar" la predominancia de la lateralidad diestra en los niños.


La lateralidad es la función que hace posible que nos orientemos en el espacio y en el tiempo, y por lo tanto, nos permite entender y manejar los códigos escritos (letras y números). Sin unas coordenadas bien definidas, no podríamos orientar los símbolos cuyo significado tiene relación con la forma que tienen y el lugar que ocupan en el espacio y el tiempo. Una lateralidad bien establecida evitará futuras confusiones por ejemplo entre "23" y "32" o entre "la" y "al" 



Para los lectores sin problemas de lateralidad, los ejercicios léxicos como los que involucran el uso de palíndromos no representan un gran problema puesto que sus hemisferios cerebrales (derecho e izquierdo) no compiten sino más bien colaboran cuando leen estas palabras.



Los palíndromos son palabras cuyas letras pueden ser leídas de izquierda a derecha y viceversa. 
Ana, oso, Adán, eme, ele, ese, Salas, son algunos ejemplos.
A veces una frase, Luz azul, u oración completa, La diva ama a Vidal, puede ser un palíndromo.
Cuando esta característica se presenta en los números se les denomina números capicúa. 11,101,999,2002.
En el aula de español sería interesante usar estas palabras para motivar la creatividad de los alumnos en el uso del idioma. También como ejercicio de deletreo para el nivel básico.
¿Se te ocurren más palabras que se puedan leer al revés?   

lunes, 8 de agosto de 2011

Me gustan los cognados



Aunque nos parezca lo contrario, la primera lección  no siempre termina siendo la más fácil. A pesar que los profesores y alumnos esperamos que sea así. Para algunos alumnos, el primer día de clases también puede ser su primer día de frustración.


Te has preguntado, ¿cuántas palabras nuevas escucha y escribe un alumno en su primer día de clases de una lengua extranjera? ¡Y se supone que es la primera clase!


Se dice que la primera impresión es la que cuenta, entonces, ¿qué impresión causas a tus alumnos cuando presentas una avalancha de nuevas palabras desde el primer día?
Realmente la única forma de darte cuenta de que el vocabulario es realmente abrumador es cuando, en medio de tu sesión de aprendizaje, notes los rostros de interrogación y/o confusión de tus alumnos. Es en ese momento cuando sería conveniente hacer uso de los cognados. Otro momento adecuado sería, obviamente, al empezar la clase para facilitar el aprendizaje desde el inicio.

A mi me gustan los cognados. Aunque algunos digan que no hay que usarlos mucho porque los falsos pueden generar confusiones y malentendidos. En mi opinión, es preferible correr el riesgo e incentivar a los alumnos a que aprendan de sus errores y que vayan reconociendo, mediante la práctica, cuáles son los que realmente pueden ayudarlos a comunicarse mejor.


El uso de cognados en la primera sesión de clases es una ventaja porque estos forman parte de los conocimientos previos de los alumnos, de manera que al usarlos estamos facilitando la comprensión de estructuras y conceptos básicos porque no tenemos el factor distractivo constituído por el nuevo vocabulario. En lo que concierne a la práctica comunicativa del idioma, su uso facilitaría la comunicación hablada y escrita desde el primer momento. Resulta también ventajoso para enseñar a los alumnos una de las primeras estrategias para aprender un idioma extranjero: aprender a reconocer los cognados antes de empezar a leer un texto y confirmar su significado de acuerdo al contexto del mismo lo cual facilitaría también la comprensión lectora.


El español y el inglés tienen muchos cognados en común por lo cual su uso también nos ayudará a construir ejemplos más fáciles de entender y mucho más significativos.